A más de 3 semanas de fuego ininterrumpido en las sierras de Córdoba, la preocupación sobre el pulmón de la provincia se expresa en las calles de varias localidades.
Al tiempo que el fuego todavía continúa afectando a varios focos de incendios activos en la provincia, se estiman ya que en 2020 el fuego arrasó 190.000 hectáreas del 3% de los bosques nativos de la provincia de Córdoba. Actualmente en los distintos focos de incendios de campos que hay en toda la provincia, trabajan unos 5.000 bomberos y brigadistas voluntarios de 190 cuarteles de bomberos voluntarios.
VER: Que el humo no nos tape el bosque
A su vez, también el paso del fuego se registra en las provincias de Salta, Tucumán, Jujuy, Catamarca y La Rioja. A nivel global, según la NASA, durante el mes de agosto se registró una media de 10.000 incendios diarios en todo el mundo. De aquellos fuegos, el 70% sucedieron en África.
Debido a esta situación, numerosas organizaciones volvieron a convocarse bajo el lema de “Vecinos autoconvocados nos movilizamos por el monte”. La protesta se replicó en la capital provincial, Agua Oro, Río Ceballos, Santa María de Punilla, Mendiolaza, Salsipuedes, Villa Allende y Saldán, La Calera, Cruz del Eje, La Falda, San Marcos Sierras y Unquillo.
En Villa María, jóvenes se convocaron en una concentración en la plaza Centenario. En un documento coordinado a nivel provincial, los movilizados exigieron, entre varias demandas, el cese de las quemas, la renuncia de Diego Concha, director de Defensa Civil de la Provincia; el ordenamiento territorial del bosque nativo en forma participativa y el control de las zonas incendiadas para evitar el cambio en el uso del suelo.
Marcos David, de la Asamblea Socioambiental el Monte Nativo Vuelve, en diálogo con Tribuna, aseguró que “vamos por el camino de la emergencia y no solamente sanitaria si no que es una emergencia social, económica, ambiental que nos condiciona a pensar en el desastre como un proceso”.
En el plano local, denunció que siguen sucediendo incendios por causa de microbasurales en espacios verdes y parches de monte en la ciudad por descuidos y desacuerdos de privados y el Estado. A su vez, destacó el trabajo que viene realizando la Asamblea en lo que respecta a la planificación técnica de la reserva de 27 hectáreas del monte nativo local, la creación de brigadas forestales para combatir los incendios.
“Hay un dilema entre el estado y el privado, nadie suelta la cuerda, es un tire y afloje todo el tiempo. Mientras tanto nos tapa la basura, el fuego, el desmonte, el negocio de unos pocos”.
Por su parte, la Mesa de Soberanía Alimentaria, a través de un comunicado difundido en la ultima compra organizada de frutas y verduras, también expresó su preocupación respecto a la situación de los incendios, señalando que se esta llevando a cabo un “ecocidio”, a causa de “negocios que permiten el avance de la frontera agrícola y la expansión inmobiliaria y minera, con la complicidad del gobierno provincial”.
Juego de intereses
Investigadores del Instituto Gulich –una alianza estratégica entre la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE)- estimaron que entre 1999 y 2017 se incendiaron 770.000 hectáreas de serranías en la provincia de Córdoba.
Por otro lado, el avance de la urbanización en zonas serranas denota un evidente cambio en el uso del suelo: entre la ciudad de Córdoba y las localidades del Gran Córdoba suman más de 50 barrios cerrados y countries: 29 están en la Capital, otros siete en Villa Allende y en Mendiolaza.
En septiembre de 2018 un grupo de inversionistas inmobiliarios presentó el proyecto Torres del Lago, que comprendía la construcción de 18 torres en el límite de Villa Carlos Paz y Villa Santa Cruz del Lago. Precisamente, los fuegos en la ladera de Villa Carlos Paz se desataron en una zona que fue incorporada al ejido municipal en diciembre de 2018.