La situación se recrudece con los salarios que no alcanzan a la inflación y el aumento de precios no avizora un techo. La Canasta Básica para una familia llegó a un monto de $128.000.
Desde hace años las condiciones de vida de las familias trabajadoras del país se recrudecieron fuertemente. Más del 40% de la población vive en condiciones de pobreza, y la situación se profundiza en los jóvenes que tienen entre 12 y 17 años, donde el 58% vive en condiciones de pobreza.
A su vez, alrededor de 5 millones de personas viven en la indigencia, o sea que no alcanzan a cubrir ni siquiera sus necesidades básicas de alimentación. De ellos, alrededor de 2 millones son niños menores de 14 años. La situación es alarmante.
Según el último informe del INDEC, durante enero de 2022, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) varió con respecto a diciembre de 2021 un 4,2%, mientras que el aumento de la canasta básica total (CBT) fue de 3,3%. Las variaciones interanuales de la CBA y de la CBT resultaron de 44,7% y 39,3%, respectivamente.
Para la Junta Interna de ATE-INDEC, en la última actualización de su estudio sobre canasta básica, informaron que el salario mínimo de un trabajador -para cubrir las necesidades de una familia de 4 integrantes- debería de ser de $128.832.
En cuanto a la inflación, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubicó en 3,9%, el más alto desde abril de 2020 y el octavo mes consecutivo que interanualmente no baja del 50%.
En paralelo, los salarios no llegan a superar esos porcentajes. El Índice de salarios total verificó un incremento de 2,6% en diciembre de 2021 (la inflación del mismo mes fue de 3,8%). El 36,1% de los/as trabajadores/as gana menos que el salario mínimo vital y móvil (SMVM), acentuándose su deterioro que desde 2013/2014 no encuentra fondo.
Según el boletín estadístico sociolaboral, del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPP), la precarización trepó al 46,4% de la fuerza laboral. “Casi 8 de cada 10 trabajadores jóvenes tienen inserciones laborales precarias”, dice el informe.