Tras la aprobación por decreto del nuevo régimen previsional, los trabajadores realizaron movilizaciones masivas en todo el país y apuntaron contra los grandes fondos de inversión.
El 19 de enero de este año el presidente de Francia, Emmanuel Macron, dio a conocer su plan de reforma al régimen previsional que consiste principalmente en elevar la edad jubilatoria de 62 a 64 años y aumentar los años de aporte que deben realizarse. Además plantea unificar los 42 regímenes especiales de cada sector para diferenciar la jubilación que percibirá un funcionario público de un trabajador de metro, por ejemplo.
La aplicación de este plan motivó un contundente repudio de los trabajadores de diversas ramas productivas que, junto a las centrales obreras, impulsaron movilizaciones y paros. Hasta el momento se realizaron doce jornadas de lucha y se estima que durante la última movilización estuvieron presentes aproximadamente 750.000 personas.
Dicha situación se da en un contexto mundial de regresión de las condiciones de vida de los trabajadores, mientras que los gobiernos promueven ajustes con el fin de reducir los déficit fiscales y cumplir con el pago de las deudas del Estado. De esta forma, se busca sostener y garantizar márgenes de ganancia de los fondos de inversión a costa de empobrecer a la clase trabajadora.
Contra los fondos de inversión
Uno de los hechos más relevantes de las protestas fue la toma de la sede del Fondo de Inversión Blackrock en París realizada por la CGT. Fabien Villedieu, el portavoz del sindicato de trabajadores ferroviarios afirmó que si “se necesita dinero para financiar nuestro sistema de pensiones y aquí hay suficiente”. “Los bancos crean crisis y BlackRock es uno de ellos”, sentenció el dirigente.
Ver: Francia: manifestantes toman la sede de BlackRock
BlackRock es el mayor fondo de inversión del mundo, concentrando activos por más de 10 billones de dólares y con incidencia en grandes corporaciones de múltiples ramas productivas como Microsoft, Apple, Banco Galicia, Bayer-Monsanto, Tenaris, entre otras. Además este fondo tiene participación en la deuda externa de los países, como es el caso de la deuda argentina, accediendo a la compra de bonos emitidos por los Estados.
Ante las protestas en la sede de BlackRock, el gobierno respondió con un despliegue policial de 11.500 agentes que efectuaron centenares de detenciones.
Otro de los objetivos de la movilización fue el edificio de Euronext tomado por los trabajadores ferroviarios el jueves 20 de abril en medio de las movilizaciones. Euronext es una bolsa de valores donde empresas como Accor, Air France-KLM, AXA, Christian Dior, Crédit Agricole, Danone, France Telecom, Heineken, L’Oréal, entre otras, buscan cotizar sus acciones que son compradas por los Fondos Comunes de Inversión.
Esta bolsa, es el principal operador financiero de la zona euro administrando 1300 empresas que acumulan una capitalización bursátil de más de 2600 mil millones de euros.
Durante la toma de Euronext, Fabien Villedieu, en representación del sindicato Sud-Rail dijo a los medios presentes que “nos dicen que no hay dinero para financiar las pensiones”, pero “no hay necesidad de sacar el dinero de los bolsillos de los trabajadores, hay algo en los bolsillos de los multimillonarios”.
Tanto BlackRock como otros fondos de inversión son los principales beneficiarios de las reformas que se llevan a cabo en todo el mundo, ya que logran presionar a los estados nacionales para que acudan a capital por medio del endeudamiento pagando con el ajuste de las condiciones de vida de la población.
En diálogo con Tribuna, el periodista Angel Tubau afirmó que “los fondos comunes de inversión buscan apoderarse de esta inmensa masa de dinero que tiene la caja pública, dinamitando el sistema de pensiones para que el trabajador tenga que costearse un fondo privado. Y, cuando la banca ‘se hunde’, llaman al estado para que la rescate, como ocurrió con Silicon Valley”, sentenció.
Reformas al régimen
Los intentos por reformar el régimen jubilatorio en Francia datan de hace varias décadas. En los 90’ se reformó la cantidad de años de aporte pasando de 37 a 40 años en el sector privado. Dos años más tarde, en 1995, se quiso imponer este cambio al sector público, decisión que mantuvo por un mes a los trabajadores de trenes y metros realizando paros totales del transporte.
En 2010 se eleva por última vez la edad jubilatoria, pasando de 60 a 62 años. El 16 de marzo de este año, pese a las movilizaciones, el ejecutivo decide evitar el debate parlamentario y aprobar por decreto la reforma previsional bajo el artículo 49.3, provocando el accionar de grandes masas de trabajadores que en defensa del régimen previsional se lanzaron a las calles para exigir su derogación.
Fuerte rechazo de los trabajadores
Las principales centrales obreras se unificaron en una intersindical, de la cual participan la Confederación General del Trabajo (CGT), Sud Solidaires, Fuerza Obrera (FO), Federación Sindical Unitaria (FSU), Unión Nacional de Sindicatos Autónomos (UNSA), Confederación Francesa de Gestión-Confederación General de Ejecutivos (CFE-CGC), Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT) y Confederación Francesa de Trabajadores Cristianos (CFTC).
Desde allí impulsaron las jornadas nacionales de lucha que se efectuaron hasta la fecha. Las mismas contaron con la participación de trabajadores de transporte, energía, sector público y personal de los museos. A su vez, se unieron más de 400.000 estudiantes universitarios y secundarios en todo el país.
Los hechos se concentraron principalmente en la ciudad de París, aunque también se han contabilizado movilizaciones en 320 localidades del país. En las últimas semanas también se organizaron escraches y boicots a las visitas ministeriales y del Jefe de Estado en algunas ciudades como la realizada durante la semana pasada, cuando Macron visitó la fábrica de la empresa Mathis, en la localidad de Muttersholtz, donde la CGT realizó un corte de luz en el establecimiento mientras transcurría la visita.
En el lugar, el presidente comentó a los periodistas presentes que “no son las cacerolas las que hacen avanzar a Francia, me interesa lo que permitirá a nuestros compatriotas vivir mejor. No tengo derecho a detenerme. Si vivimos en una sociedad en la que solo escuchamos a la gente que quiere hacer ruido no lo conseguiremos”.
A su vez, las medidas de fuerza incluyeron quema de contenedores, levantamiento de barricadas, cortes de rutas y abandono total en las tareas. Un ejemplo de esto fue el paro de los recolectores de residuos que derivó en una gran acumulación de basura en las calles de la capital.
Cabe remarcar, que durante las jornadas de lucha, los trabajadores fueron fuertemente reprimidos por la policía que intervino con carros hidrantes y gases lacrimógenos. A su vez, se estima que las fuerzas han efectuado hasta el momento 457 detenciones.
Trabajadores unidos
Tras las movilizaciones, los franceses tuvieron el apoyo de otras centrales sindicales, como el caso de la Federación General del Trabajo de Bélgica. La misma en señal de apoyo bloqueó el depósito de Total Energies en Amberes, impidiendo así las entregas de combustible a Francia por parte del grupo petrolero francés.
En la misma línea, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, del sindicato español y vicepresidente de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), afirmó que “la lucha de los trabajadores franceses es propia. Este movimiento interpela a los países de la UE”. “La historia nos dice que cuando Francia dice ‘basta’, es una señal importante”, dijo Álvarez en la concentración convocada por la UGT ante la Embajada de Francia para apoyar a la intersindical francesa en su jornada de movilización y huelgas contra esta reforma.
🤝Hoy estoy en Toulouse en la manifestación contra la reforma de las pensiones en Francia.
‼️En Francia quieren recortar las pensiones; en España hemos subido las cotizaciones de los que más cobran con dialogo social
📣Todo nuestro apoyo a los sindicatos franceses. #manif6avril pic.twitter.com/6rYncvB5yq— Pepe Álvarez (@SG_UGT) April 6, 2023
También recibieron apoyo del sindicato bancario (AEBU), de Uruguay, que en su última movilización en la ciudad de Montevideo, decidieron detenerse frente a la Embajada de Francia para entregar una carta en apoyo a las movilizaciones donde mencionaron que “este momento histórico nos hace coincidir con la lucha de los trabajadores de su país contra una nueva reforma de la seguridad social”.
Aprobación de la ley por el Consejo Constitucional
El sábado 15 de abril el Consejo Constitucional de Francia validó la reforma de las pensiones. Ante ello, los principales partidos de oposición al gobierno salieron a declarar a la prensa su inconformidad con la medida. Por ejemplo, Marine Le Pen, diputada y representante del partido Agrupación Nacional, dijo “la entrada en vigencia de esta reforma marcará la ruptura definitiva entre el pueblo francés y Macron”.
Por su parte, Emmanuel Macron dijo por cadena nacional que “los cambios eran necesarios para garantizar la pensión de todos y producir más riqueza para nuestra nación. La respuesta no podía estar en bajar las pensiones o aumentar las cargas sociales de los que trabajan y tampoco podíamos seguir sin hacer nada porque crecerían los déficits y la deuda de las generaciones futuras”.
En este marco, instó a un “pacto de vida laboral” a las centrales sindicales y cámaras empresariales creando una mesa de negociación, pero hasta el momento los únicos presentes en esas reuniones han sido la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa (CPME) y la Unión de Empresarios Locales (U2P).
La presidenta de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo, Laurent Berger, expresó que “esta reforma es injusta. La sabiduría democrática exigía no promulgarla y volver al diálogo. Desde un principio el desprecio a los trabajadores ha sido constante, pero su dignidad en la calle es más fuerte”.
Por otra parte, Sophie Binet, secretaria general de CGT, mencionó a través de su cuenta de Twitter que “el problema es que Macron nos tiende la mano después de habernos hecho un corte de mangas”. “No se puede gobernar un país en contra de su gente”, sentenció.
Le #1erMai sera unitaire et populaire, pour le retrait de la #ReformeDesRetraites ✊
Montrons à ce gouvernement que nous ne passerons pas à autre chose. On ne peut pas gouverner un pays contre son peuple #Stop64ans https://t.co/t105JhkBoW pic.twitter.com/rrvB9qlgel
— Sophie Binet (@BinetSophie) April 19, 2023
De esta forma, desde la intersindical convocaron a una “marcha excepcional” para este primero de mayo, día del trabajador, que se va a convertir en la decimotercera manifestación nacional en contra de la reforma y va a materializar una vez más un ejemplo de lucha por los trabajadores de Francia y de todo el mundo.