Asimismo se valoró la cooperación sur-sur como respuesta a un orden internacional injusto con las economías en desarrollo
Los días 15 y 16 de septiembre, 116 países participaron en el encuentro del G77+China en La Habana, Cuba. Tras dos días de debates, se firmó la declaración final en la que se destaca el llamado a “la urgente necesidad de una reforma integral de la arquitectura financiera internacional y de un enfoque más inclusivo y coordinado de la gobernanza financiera mundial”.
En el encuentro, los participantes coincidieron en la necesidad de revertir un “orden económico internacional injusto para los países en desarrollo”, y se focalizó en la cooperación entre el Sur Global en áreas clave como la ciencia, tecnología e innovación, la recuperación tras la pandemia de Covid-19, el cambio climático, la reestructuración de las deudas y el financiamiento para el desarrollo.
En su disertación, Alberto Fernández afirmó que “la globalización poco a poco fue fracasando y si uno mira el presente se da cuenta que estamos viviendo un cambio de época”. En este mismo sentido, insto a “cambiar el sistema financiero que sigue operando con las mismas lógicas”.
Por su parte, Lula Da Silva mencionó que la “revolución digital” y la “transición energética” son “dos grandes transformaciones en curso” que “no pueden ser modeladas por un puñado de economías ricas, reeditando la relación de dependencia entre el centro y la periferia”.
En este encuentro, el Grupo del G77+China aprobó la reincorporación de México al foro.
