En el marco del encuentro, el gobierno brasileño, el Banco Mundial y el BID, realizaron un acuerdo con el objetivo de “atraer inversiones extranjeras”.
El miércoles 21 de febrero, inició la cumbre de ministros de Asuntos Exteriores del G20 en Río de Janeiro, Brasil. Allí el gobierno anfitrión asumió la presidencia temporal del organismo.
Entre los temas discutidos, se enfatizó en la necesidad de generar una reforma institucional global. En ese sentido, Mauro Vieira, canciller de Brasil, declaró que “las instituciones multilaterales no están equipadas de forma adecuada para lidiar con los desafíos actuales, como ha quedado demostrado por la inaceptable parálisis del Consejo de Seguridad en relación con los conflictos”.
En el marco del encuentro, la página oficial del G20 anunció la asociación entre el gobierno brasileño, el Banco Mundial y el BID, con el objetivo de “promover una economía verde y atraer inversiones extranjeras”. El plan contempla 27.000 millones de reales para “reforzar el financiamiento climático y crear un entorno favorable a las inversiones sostenibles en el país”.
Por otro lado, el presidente de Brasil, Lula da Silva, recibió a Antony Blinken, el secretario de Estado de EE.UU., en el palacio de Planalto. Los funcionarios discutieron sobre los conflictos en Latinoamérica, Europa y Medio Oriente.
Recebi o Secretário de Estado dos Estados Unidos, Antony Blinken. Conversamos sobre o @g20org, a iniciativa pela melhoria da condição dos trabalhadores que lançamos com o presidente Biden, a proteção do meio ambiente, a transição energética, a ampliação dos laços de investimento… pic.twitter.com/SXwSKaCwPt
— Lula (@LulaOficial) February 21, 2024
Según lo expresado en la página oficial del gobierno de Brasil, “el secretario (Blinken) agradeció a Brasil su intervención en el diálogo entre Venezuela y Guyana. El presidente Lula reafirmó su deseo de paz y el fin de los conflictos en Ucrania y la Franja de Gaza. Ambos coincidieron en la necesidad de crear un Estado palestino”, expresó.
