Advierten respecto a la estabilidad financiera, el estancamiento económico y el problema de la “deuda oculta”.
Por medio de dos notas publicadas el 1 de abril la entidad monetaria mostró su preocupación por los altos niveles de deuda, el estancamiento del crecimiento y la llamada “deuda oculta” en los países de ingresos bajos.
En un primer texto, titulado “Los riesgos fiscales y financieros de un mundo marcado por una deuda elevada y un crecimiento lento”, los funcionarios del área de Finanzas y Mercados Monetarios advierten que “la deuda pública como porcentaje del producto interno bruto ha aumentado significativamente en las últimas décadas”, donde se espera que en 2028 supere el 120% del PBI en las “economías avanzadas”.
Plantean, asimismo, que “si bien es necesario un ajuste considerable de las finanzas públicas, esto no debe interpretarse como un llamado a la austeridad. Un giro demasiado brusco podría ser contraproducente y empujar a las economías a la recesión”.
En una segunda nota, publicada por funcionarias del Departamento Jurídico y titulada “La deuda oculta perjudica a las economías”, se reconoce el nivel sin precedentes de la deuda pública mundial y llama a revisar la legislación en materia de transparencia pública y divulgación de la información para contrarrestar la llamada “deuda oculta” que “suponen una amenaza creciente para los países de ingreso bajo ya altamente endeudados”.