Por un lado el Nuevo Frente Popular quedó primero en Francia. Por el otro, el Partido Laborista británico rompe con 14 años de liderazgo conservador en el Reino Unido.
El domingo 7 de julio se realizó la segunda vuelta de las elecciones legislativas para determinar la nueva conformación de la Asamblea Nacional en Francia.
A pesar de que la primera vuelta realizada el 30 de junio había arrojado una victoria de la Agrupación Nacional -partido de Marine Le Pen-, durante la segunda jornada eleccionaria, el Nuevo Frente Popular (NFP) resultó electo, obteniendo 182 escaños -51 más que en la antigua conformación asamblearia-, por sobre Ensemble -partido de Emmanuel Macron- y Agrupación Nacional.
El NFP es una alianza creada el 10 de junio e integrada por el Partido Socialista, Francia Insumisa, los Ecologistas, el Partido Comunista Francés, la Izquierda Republicana y Socialista, entre otros partidos.
Asimismo, el NFP ha recibido el apoyo del sindicalismo francés. En este sentido, la CGT salió a presionar al gobierno de Emmanuel Macron a través de un comunicado para que “respete la elección de las urnas y llame a la formación de un nuevo gobierno en torno al programa del Nuevo Frente Popular”.
El programa de gobierno elaborado por el NFP incluye la declaración de emergencia social, congelando los precios de los productos de primera necesidad en alimentación, energía y carburantes, la derogación de “los decretos de aplicación de la reforma de Emmanuel Macron que eleva la edad de jubilación a 64 años, así como la reforma del seguro de desempleo”, aumentar el salario mínimo a 1.600 euros netos, políticas de vivienda, entre otras propuestas.
Los laboristas al poder
El 4 de julio se realizaron las elecciones parlamentarias en Reino Unido tras el llamado a comicios anticipados por parte del primer ministro, Rishi Sunak.
Tras 14 años de poder en manos del Partido Conservador, el Partido Laborista británico se consagró victorioso obteniendo 412 bancas -209 más que en las elecciones del 2019- por sobre los conservadores, quienes sufrieron la peor derrota en su historia -121 bancas, 244 menos que en 2019-.
Asimismo, los Liberales Demócratas obtuvieron 71 bancas -frente a las 11 del 2019- y el Partido Nacional Escocés sólo logró 9 bancas -en 2019 había conseguido 48-. Cabe resaltar los resultados de Reform UK, el partido liderado por el impulsor uno de los mayores impulsores del Brexit, Nigel Farage. Reform UK obtuvo 5 bancas, sin embargo, se posicionó como el tercer partido con más votos obtenidos con 4.114.287.
Con la renovación del Parlamento británico, el líder laborista, Keir Starmer, se convirtió en el nuevo primer ministro.
