La bolsa de valores de Tokio transitó por su peor jornada desde 1987, generando repercusiones en el mercado financiero global.
El pasado lunes 5, los mercados de valores del mundo tuvieron fuertes caídas tras una venta masiva de acciones en Asia. La caída iniciada en Japón tuvo repercusiones en Europa y Estados Unidos.
Las principales pérdidas se vieron en los mercados asiáticos. En este sentido, el Nikkei 225 -principal índice de la bolsa de Tokio- cayó en 12,4%, lo que se sumó a una caída del 5,8% producida el viernes anterior. Esto se tradujo en el mayor desplome del mercado de valores japonés desde 1987.
Este hecho se replicó en Corea del Sur -una caída del 9%- y Taiwán -una caída de 8%-. Por su parte, en Hong Kong, la caída fue menor -del 2,13%-. El panorama asiático se trasladó hacia Europa. En este sentido, las bolsas de París, Londres, Fráncfort, Madrid y Milán tuvieron caídas de entre 1,5 y 3%.
Los principales índices de Wall Street en EE.UU. también tuvieron fuertes caídas. Los 30 valores que integran el Promedio Industrial Dow Jones -índice que cayó en 2,6% en términos generales- terminaron en rojo, lo que implica la peor jornada desde 2022 para dicho índice. Por su parte, el Nasdaq -mercado de valores vinculado al sector tecnológico- cayó en 3,43%.
Cabe resaltar que el miércoles 31 de julio el Banco Central de Japón subió los tipos de interés de 0,1 a 0,25%, el valor más alto desde el 2008, en un intento de desacelerar un proceso inflacionario. Además, anunció una política de reducción sostenida de sus compras mensuales de bonos soberanos hasta “alrededor de 3 billones de yenes” para enero-marzo de 2026.