El Gobierno despidió a 110 empleados del Hospital Posadas y anunció descuentos a los trabajadores del Hospital Garrahan que adhirieron a las medidas realizadas en el marco de una conciliación obligatoria.
“En el camino hacia una salud pública eficiente, transparente y al servicio de los argentinos, el Gobierno Nacional continúa con el reordenamiento profundo de los hospitales nacionales“, aseguró el Ministerio de Salud en el comunicado en el que anunció las medidas.
El Gobierno argumentó que “luego de auditorías internas y controles de asistencia, se comprobó que estos contratados no cumplían con sus funciones o presentaban ausencias reiteradas injustificadas”.
“Cada peso que se malgasta en quienes no trabajaban, ahora se va a invertir en quienes sí ponen el cuerpo todos los días, en mejores insumos, equipamiento y atención para los pacientes”, añadió.
Según expresó la asamblea de trabajadores del Posadas, quienes vienen sosteniendo desde hace semanas el reclamo, la situación económica de los residentes es insostenible. La remuneración básica para un residente de primer año se ubica en los $797.000, cifra que no se condice con las más de 60 o 70 horas semanales que dedican a su formación y a la atención de pacientes, denunciaron.
A su vez, la asamblea explicó que el déficit de recursos esenciales, los despidos y la salida de profesionales han comenzado a deteriorar el funcionamiento de la institución.
Ante este escenario la asamblea pidió en los primeros días de junio la convocatoria para una mesa de diálogo para el lunes 9, que en caso de no efectivizarse, se respondería con la concreción de un paro de actividades para el día siguiente.
Sin responder al pedido, la dirección del centro de salud comunicó una mejora de sus ingresos (un bono compensatorio de $300.000) para los médicos residentes a la vez que les advirtió que “se deberán revertir las medidas de fuerza anunciadas que puedan interrumpir el normal desarrollo de las tareas profesionales para evitar futuras sanciones”.
Días después del anuncio, Angel Elia, director del Posadas, presentó su renuncia por razones “estrictamente personales”.
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— Residentes Hospital Posadas (@ResisPosadas) June 12, 2025
En ese marco, la asamblea expresó su repudio a los recientes despidos y aseguró que el bono representa un “alivio transitorio, pero no resuelve el problema de fondo: el déficit presupuestario del sistema de salud”.
Además reiteró su reclamo por una “recomposición salarial justa, sostenida y sin exclusiones” y la “inmediata apertura de una mesa de diálogo”.
Garrahan
En el mismo comunicado, el Gobierno informó que, ante el “incumplimiento deliberado” de la conciliación por parte de ATE, se les descontarán los días a quienes adhirieron a las medidas de fuerza gremiales en el Hospital Garrahan.
Los residentes del centro de salud venían sosteniendo desde hace semanas un reclamo de una recomposición del 50% en sus becas, así como el pago de un incentivo por alta complejidad.
Durante la primera semana de junio realizaron una huelga de 24 horas con reprogramación de turnos ambulatorios y garantizando la atención de urgencias e internación. La semana pasada, la asamblea llevó adelante un paro de 48 horas con movilización a Plaza de Mayo el día miércoles.
Para ese día, los integrantes del Consejo de Administración se ausentaron nuevamente a una audiencia de conciliación con los delegados sindicales convocada por la Secretaria de Trabajo. En ese marco, presentó su renuncia la presidente del Consejo de Administración, Soraya El Kik, “por motivos de salud”.
El Garrahan es el principal hospital pediátrico del país, que aborda aproximadamente la mitad de casos oncológicos a nivel nacional y realiza entre el 60% y 70% de trasplantes sólidos en niños y niñas.
