Distintas cámaras empresarias advierten sobre la crisis que atraviesa el sector industrial instando al Gobierno Nacional a realizar una reforma tributaria en el país.
En las últimas semanas, distintas cámaras empresariales exigieron al Gobierno Nacional avanzar en reformas del sistema impositivo con el objetivo de reducir costos, generar incentivos a la actividad productiva y acceder a financiamiento.
En la Bolsa de Comercio de Rosario se realizó el Precoloquio del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA), un encuentro donde se reunieron empresarios y políticos para analizar la coyuntura.
En el acto de apertura disertaron los gobernadores Martín Llaryora, de Córdoba, y Maximiliano Pullaro, de Santa Fe. Allí, el cordobés destacó que en la provincia “tenemos tasa cero para la industria”.
Además, describió al frente de gobernadores “Federales” como “el espacio de gobernadores que acompañó las leyes que ayudan a la macro, pero que pone límites cuando afectan al trabajo y la producción”, y pidió el apoyo para las próximas elecciones.

Además, el gobernador de Santa Fe resaltó que “la articulación entre las provincias y el sector privado es fundamental para generar crecimiento sostenible”. Y advirtió: “a la paz social la estamos manteniendo los gobernadores”.
En uno de los paneles, Pablo Sibilla, presidente de Renault Argentina, instó al Gobierno Nacional a realizar una reforma tributaria que evalúe “la carga impositiva” para que “la Argentina sea competitiva”.
Por su lado, el presidente de la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH), Carlos Ormachea, destacó la importancia de la Ley Bases y del Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) permitiendo al país “la reconexión financiera con el mundo” ya que “hoy tenemos una desventaja por el costo de financiamiento”.
Nuevo contrato productivo
En la misma dirección, la Unión Industrial Argentina (UIA) anunció su coloquio a realizarse el próximo 2 de septiembre en la ciudad de Córdoba donde presentarán el “Decálogo del Nuevo Contrato Productivo”.
Según los organizadores, los puntos expuestos en el documento pretenden “construir condiciones estructurales que igualen la cancha y permitan a la industria argentina competir globalmente, mediante reformas en los planos fiscal, laboral y de incentivos productivos”.

El martes pasado, en un evento organizado por la UIA, Martín Rappallini, su presidente, criticó la idea de una “competencia fiscal” planteada por el Gobierno Nacional, que permitiría a las provincias y municipios establecer tasas diferenciadas para atraer inversiones de empresas mediante la baja de impuestos.
“Estamos propiciando que se tenga en cuenta la importancia de la seguridad jurídica, la continuidad en el tiempo y también de que no haya una guerra de tasas porque si bien uno puede buscar un beneficio, en el mediano plazo es más alto el costo”, sentenció.
Entre buscar financiamiento y bajar los costos
La semana pasada, la Cámara Argentina de Sociedades y Fondos de Garantía (CASFOG) y Focus Investment Management realizaron un encuentro en las instalaciones del Parque Industrial, Logístico y Tecnológico (PILT) de Villa María.
Durante varias jornadas, bajo el título de “Día PyME”, realizaron exposiciones con el objetivo de promover “el acceso a garantías recíprocas, microcréditos y otras formas de financiamiento productivo” a pequeñas y medianas empresas de la ciudad y la región.
El ministro de Economía, Luis Caputo, mantuvo una reunión con la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA), que tuvo lugar en la sede empresaria.
En uno de los paneles, el economista Carlos Seggiaro, docente de la Universidad Nacional de Villa María, advirtió que la disminución de los márgenes de rentabilidad producto del actual modelo económico “no es una foto transitoria”. También identificó una inconsistencia en el tipo de cambio que genera “serias dificultades” para los sectores productivos.
Marcelo Uribarren, presidente de la Unión Industrial de Córdoba (UIC), describió la situación actual como una “crisis”, estimando que las condiciones no mejorarán “como mínimo a junio del año que viene”, por lo que la industria sólo cuenta con un camino: “tratar de bajar los costos para poder ser competitiva”.