Para visibilizar la situación que atraviesan decidieron realizar una rueda de prensa en el Leonardo Favio.
En ese lugar plantearon ante los medios locales que la situación que atraviesan entorpece el funcionamiento de clases debido a que se les había prometido la construcción de un edificio propio hace 6 años, motivo por el cuál estaban cursando en las inmediaciones de la UTN (Universidad Nacional Tecnológica).
Según declararon las estudiantes este año no habían iniciado las clases hecho que también estaba ocurriendo en la localidad de San Francisco con su respectivo Proa en una situación similar a falta de edificio y profesores.
Luego del reclamo estudiantil fueron convocados a una reunión con el intendente de la ciudad, Martín Gill, quién se comprometió a actuar de intermediario con la provincia al considerarla encargada de la ejecución de las obras. Además de acercar soluciones para la cobertura de cargos docentes que se encuentran vacantes.
La semana pasada el ministro de Educación de la provincia, Grahovac, dio a conocer el conflicto que tienen con Makiber, empresa encargada de la construcción. Según relató ya se habían girado notificaciones a la empresa por la paralización de las mismas. Fueron tantas las intimaciones que “en noviembre se aplicó una multa de 13 millones de pesos que no es por una demora en particular, es porque aplicamos varios ítems por todas las faltas”.