Trabajadores y estudiantes se movilizaron en Irán por la escalada de precios en los alimentos. En algunos casos como el aceite, el arroz y el pan, los aumentos llegaron a representar una suba del 300%.
Una de las causas del alza de precios fue la eliminación del subsidio a productos de primera necesidad por parte del gobierno de Ebrahim Raisí, en un contexto de inflación del 40%, su nivel más alto desde 1994.
Los aumentos también afectaron los alquileres, que mostraron un incremento de hasta 150%. Esto se suma a la crisis que sufre el país desde 2019 cuando comenzó la suba de precios por los hidrocarburos.
Las protestas de los habitantes se llevaron a cabo en varias ciudades y fueron reprimidas por el accionar policial, que dio a conocer hasta el momento cinco muertos, centenares de heridos y detenciones.
Las movilizaciones organizadas en el último tiempo no están lideradas por ningún partido político ni organización, y son convocadas a través de redes sociales de grupos de autoconvocados.
Cabe resaltar que casi la mitad de los 82 millones de habitantes del país viven en la pobreza.