Tras una semana de paro, asambleas y movilización, los trabajadores del transporte local consiguieron que la empresa depositara el pago de sus salarios.
Durante la mañana del martes 14 de noviembre, alrededor de 40 choferes de colectivo de la ciudad acompañados por el gremio de AOITA, realizaron una protesta frente a la Municipalidad de Villa María para reclamar el pago de salarios atrasados.
Los trabajadores bloquearon las calles Tucumán, Mendoza y Entre Ríos con colectivos de la empresa Transbus S.R.L. para visibilizar el reclamo. Luego de unas horas las autoridades municipales y de la empresa mantuvieron una reunión con los referentes sindicales donde anunciaron el pago de los salarios.
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La semana anterior en una asamblea frente al Centro de Transferencia local, habían definido un paro por tiempo indeterminado por el mismo motivo. Tras una semana de paro, al no resolverse la situación, definieron la medida de fuerza en una asamblea.
Edgardo Garmendia, delegado de AOITA, había anunciado la falta de predisposición al diálogo por parte de las autoridades. “Llama la atención que nadie nos informe ni convoque sobre tratativas para solucionar el problema”, dijo en la asamblea frente al municipio.
Ese mismo día, la Municipalidad había emitido un comunicado en el que anunciaba que la demora en la rendición de los salarios fue ocasionada “por parte de algunos organismos intermedios ajenos al municipio” producto de “un complejo sistema de subsidios que enmarca al transporte urbano de pasajeros”.
