Cortes de carreteras, ocupación de bases militares y enfrentamientos con la policía son algunos de los episodios que se viven en el país andino en la disputa política entre evistas y arcistas.
La situación de crisis política y tensión social en Bolivia, que venimos describiendo número tras número, lejos está de haber mermado.
Desde hace más de 20 días que diversas carreteras han sido bloqueadas, en los departamentos de Cochabamba, Oruro, La Paz, que son algunos de los epicentros del conflicto.
Manifestantes que se posicionan a favor de Evo Morales piden la renuncia de Luis Arce, actual presidente, y que se levanten las investigaciones que acusan a Morales de violacion de una menor cuando era presidente, en la causa por estupro.
Bloqueos en Bolivia: el Pacto de Unidad se moviliza en defensa de Evo Morales
A través de un mensaje televisado el miércoles pasado, Luis Arce, consideró que “no puede haber ningún diálogo sin levantar los bloqueos ni las medidas de presión que están estrangulando a la economía de las familias bolivianas”.
“De no escuchar este clamoroso pedido del pueblo boliviano, nuestro Gobierno elegido democráticamente con más del 55 % de los votos, ejercerá sus facultades constitucionales para precautelar el interés del pueblo boliviano”, advirtió.
El viernes, un conjunto de efectivos policiales se desplazó hasta los bloqueos en La Paz para levantar los cortes de ruta y el episodio terminó con enfrentamientos directos entre policías y manifestantes que, según relatan algunos medios bolivianos, desde los cerros respondieron con dinamita.
“La paciencia y tolerancia tienen límites, razón por la cual el Estado y el Gobierno se vieron en la obligación constitucional de tomar acciones para garantizar la libre circulación”, dijo el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, en su cuenta de X.
Evo Morales respondió a los anuncios de Arce con una carta planteando que “de dar la orden de intervención policial y militar, será usted quien cargue con la responsabilidad de dividir y herir a Bolivia de forma irremediable y sin retorno. Su nombre quedará en la historia junto al de Añez, como uno de los presidentes que empobreció al pueblo, debilitó al Estado y que apuntó sus armas contra su propia gente”.
Anteriormente, el domingo 27 de octubre, Evo difundió un video donde se lo observa trasladarse en una camioneta recibiendo numerosos disparos. “Usted (Arce) conoce quién dio la orden de disparar contra mi vida, y sabe que quienes están a su alrededor no dudarán en repetirlo si es necesario”, afirmó Morales en su carta.
El viernes 1, en una conferencia de prensa desde la Coordinadora de las 6 federaciones del Trópico, Morales confirmó que evitarán el derramamiento de sangre, anunciando el levantamiento de los bloqueos, e iniciando una huelga de hambre.
