China salió a responder con más aranceles a importaciones norteamericanas y la Unión Europea busca negociar condiciones para no sufrir las consecuencias económicas.
El anuncio de los aranceles de Donald Trump generó un impacto inmediato sobre las acciones en las bolsas de todo el mundo, el precio de los commodities y la cotización del dólar a escala mundial.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, en un comienzo había “ofrecido aranceles ‘cero por cero’ para los bienes industriales” para apaciguar el impacto sobre el continente europeo, aunque luego impuso aranceles a productos norteamericanos como represalia.
El 10 de abril, EE.UU. suspendió por 90 días los aranceles generales para negociar acuerdos bilaterales con los distintos países y bloques. Ante ello, la dirigente dijo que “se trata de un paso importante hacia la estabilización de la economía mundial” y suspendió los aranceles hasta el 14 de julio para emprender las negociaciones.

En ese sentido, Maros Sefcovic, comisario de Comercio de la UE, se reunió con el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, aunque sin avances al respecto. Previo al encuentro había dicho que “si las conversaciones fracasan, la UE reactivará los aranceles suspendidos y considerará nuevas medidas, incluidas posibles tasas a grandes tecnológicas estadounidenses”.
El viernes 11 de abril, el mandatario de China, Xi Jinping, en una reunión con el presidente de España, Pedro Sánchez, dijo que junto a la Unión Europea deberían “oponerse conjuntamente a los actos unilaterales de intimidación”.
Ese mismo día el gobierno chino aumentó sus aranceles a las importaciones estadounidenses al 125%, ocasionando otra escalada de aumentos por parte de EE.UU. llegando a un 245% para los productos chinos.
La dependencia china
Sin embargo, la dependencia de EE.UU. de productos tecnológicos provenientes de China hizo que la Oficina de Aduanas norteamericana excluyera de la actual política arancelaria a los smartphones, componentes de ordenadores y chips semiconductores, entre otros dispositivos electrónicos.
Por otra parte, el mandatario chino realizó una gira en busca de acuerdos de libre comercio con países miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN). En Vietnam, declaró que junto a China “deben reforzar la determinación estratégica, oponerse conjuntamente a los actos unilaterales de intimidación, defender el sistema mundial de libre comercio y mantener estables las cadenas industriales y de suministro mundiales”.