El Gobierno anunció la intervención del Tesoro en el mercado para frenar la corrida cambiaria, poniendo punto final a la política de libre flotación.
El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, anunció el pasado martes a través de X que el Tesoro Nacional “participará en el mercado libre de cambios con el fin de contribuir a su liquidez y normal funcionamiento”.
Al día siguiente, en una entrevista televisiva, el funcionario afirmó que “no hay rotura del esquema cambiario ni del esquema de bandas” y argumentó que las medidas responden a “situaciones puntuales”, como la intervención de un banco “de origen chino” que “trató de levantar el precio del dólar $40”.
El Tesoro Nacional anuncia que a partir del día de la fecha participará en el mercado libre de cambios con el fin de contribuir a su liquidez y normal funcionamiento.
— Pablo Quirno (@pabloquirno) September 2, 2025
Esta decisión se da en un escenario de recientes escaladas en la cotización del dólar, las tasas de interés y diferentes medidas que viene aplicando la gestión, como la suba de los encajes bancarios, tras el desarme de las letras de liquidez (LEFIs). Desde el 1 de septiembre, el BCRA elevó del 50% al 53,5% el porcentaje de fondos que los bancos deben inmovilizar. En julio, este porcentaje era del 40%.
Además dispuso que las entidades podrán integrar esos 3,5 puntos extra con títulos del Tesoro para la licitación que se realizó el pasado 26 de agosto, en la que se renovó el total de la deuda en pesos del mes y pudo absorber $1 billón extra hasta después de las próximas elecciones. Para lograrlo debió aceptar tasas de interés de hasta 75,66% anual.
Para Ignacio Morales, de Wise Capital, “esto dejó a las entidades frente a una disyuntiva: aceptar rendimientos nulos sobre una proporción mayor de los pesos que deben mantener inmovilizados o volcarlos hacia los bonos”.

El director del Banco Central, Federico Furiase, afirmó que lo anunciado no implica “ningún volantazo”. “Al Fondo le pareció genial que sea transparente y que se avise al mercado. Está al tanto de esto. Esto lo podemos hacer porque tenemos un programa de estabilización que nos permite blindarnos ante cualquier ataque político”, añadió.
En este marco, el JP Morgan redujo su proyección de crecimiento para la Argentina en 2025, a causa de “la desaceleración de la economía en el segundo trimestre, la volatilidad de las tasas y la incertidumbre electoral”. La entidad prevé este año un crecimiento del 4,7% en vez del 5,3% proyectado originalmente.
Por otro lado, el Morgan Stanley, en un informe titulado “El imperio contraataca”, señaló que los inversores están en un momento de incertidumbre en torno a las recientes políticas cambiarias, que recuerdan a la gestión anterior y “contradicen la narrativa del presidente Milei sobre la reforma regulatoria”.
“Los riesgos se hacen ahora más evidentes para los inversores de renta variable, ya que se necesitan tasas de interés altas para defender la banda cambiaria autoimpuesta por el Gobierno”, sentenció.
El programa económico del Gobierno favorece la rentabilidad financiera de los bancos, mientras los industriales se quejan porque esto encarece el crédito para financiar la actividad. Esta semanas el gobierno volvió a intervenir en el mercado para contener el dólar ante el riesgo de una suba que superase el techo de la banda cambiaria establecida […]