“Si no llegamos a un acuerdo va a haber medidas de fuerza”, dijo el secretario local de Atilra.
En un conflicto que lleva aproximadamente dos semanas, los trabajadores de la industria láctea buscan una recomposición salarial para afrontar las condiciones de vida que en el contexto de pandemia se han visto profundizadas de forma negativa.
En ese marco, durante el día de ayer se realizó una nueva reunión entre la representación gremial (Atilra), y las cámaras del sector. El propósito de la misma, fue la negociación salarial en curso que ya había pasado a conciliación obligatoria dictada por la cartera de trabajo luego de que el sindicato había convocado a un paro el 13 de julio.
La propuesta que llevó Atilra a la mesa de diálogo incluye una recomposición salarial del 13,6% para el año en curso más aportes y contribuciones que la industria adeuda como consecuencia de los aumentos postergados. La propuesta del gremio tiene su fundamento en los últimos datos difundidos por el INDEC sobre el Índice de Precios al Consumidor.
Desde el sector empresario nucleado en el Centro de la Industria Lechera (CIL) y la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel) propusieron incorporar $4000 al acuerdo previo, sumando $1167 a las liquidaciones salariales entre julio y diciembre del corriente año.
Ante la imposibilidad de avanzar en un acuerdo tras la reunión, la conciliación obligatoria se posterga hasta el lunes próximo donde las partes deberán cerrar el acuerdo.
Situación local
En diálogo con Pedro Fernández, secretario local de Atilra manifestó “la verdad e
s que hubo una propuesta de parte de los empresarios que se aleja mucho de lo que nosotros estamos solicitando. Así que no se arribó a ningún acuerdo, volvemos a sentarnos a negociar el lunes a la mañana”. “Nosotros estamos pidiendo el índice inflacionario. Ellos hasta ahora no han ofrecido mucho. Seguiremos trabajando hasta la reunión del lunes en la que vencerá la conciliación obligatoria”.
– Con la conciliación vencida, ¿Analizan medidas de fuerza?
Una vez que se venza la conciliación, y si no llegamos a un acuerdo va a haber nuevamente medidas de fuerza. No tenemos otra manera de destrabarlo a esto. Salvo que aparezca otra manera de hacerlo, pero mientras tanto la idea es esa.
– ¿Existe predisposición para negociar?
Los argumentos son siempre los mismos: que no es el momento, o por la pandemia, que mucha gente tiene más de 60 años y no está yendo a trabajar, que venden poco, que los productos vendidos son aquellos de menor valía, eso esgrimen las empresas. Así que nosotros habíamos quedado en negociar por los primeros días de mayo y en realidad la negociación se inició recién ahora y a medida que van pasando los días y los meses nos vamos alejando más, tomando toda la inflación, cada uno de los meses que va pasando.