Con la proximidad del vencimiento del contrato para el dragado y balizamiento de la hidrovía Paraná-Paraguay, organizaciones plantean la necesidad que el Estado asuma las tareas de control recuperando la soberanía perdida.
El 30 de abril vence la concesión del mantenimiento de las vías navegables del Paraná a cargo de la empresa Hidrovía S.A, sociedad integrada por la local Emepa y la belga Jan de Nul.
Este hecho ha suscitado expectativas por el lanzamiento de los anuncios del presidente que planteó la creación de una empresa que realizaría las tareas delegadas actualmente a empresas privadas luego de que el sistema fuera entregado en el marco de las reformas del Estado en una época de privatizaciones por los 90´.
Ver: Granos y puerto: la formula exportadora
Luego el anuncio luego fue disuelto y reemplazado por la creación de un Consejo Federal de la Hidrovía (CFI) dependiente del ministerio de Transporte, al cual son invitados a participar en carácter de consultores representantes de las provincias; cámaras privadas como la de industria aceitera, de puertos privados, de la minería; sindicatos del sector y representantes de las universidades nacionales, entre otros.
A pesar de los anuncios que retrocedieron sobre la iniciativa de creación de una empresa controlante, organizaciones del país siguen insistiendo en la necesidad de recuperar el control estratégico y detener la sangría que corre por las arterias principales del Paraná donde se fugan las ganancias fruto del trabajo y recursos propios.
El pueblo quiere saber de qué se trata
El martes se realizó una charla acerca de “Soberanía Portuaria y Fluvial”, organizada por el Frente por la Soberanía Nacional. La misma fue transmitida de manera virtual y en la oportunidad disertaron el Ingeniero Horacio Tetamantti (ex secretario de Vías Navegables), Oscar Leguizamón (Capitán Fluvial y Perito Naval), Julio César Urien (Teniente de Fragata retirado y presidente de la fundación FIPCA).
Las disertaciones giraron en torno a la derogación del decreto 949/20, que dispone el llamado a licitación pública a empresas privadas nacionales e internacionales, para la realización de obras con peaje en la denominada Hidrovía Paraguay- Paraná, una vía navegable comprendida entre el kilómetro 1.238 del Río Paraná y el kilómetro 239 del canal de Punta Indio, en el Río de la Plata; y la necesidad de unir fuerzas para que no entreguen la soberanía fluvial y portuaria.
En ese marco, solicitaron al Gobierno Nacional que den a conocer los diversos aspectos de la nueva licitación, y se unieron al pedido de información sobre la construcción del canal Magdalena, “que permite a los buques que transportan las cargas de nuestro comercio exterior contar con una salida directa al mar, desde los puertos fluviales hacia los puertos de nuestro litoral marítimo y viceversa”.
El disertante Teniente Urien Consideró esta obra como parte de un territorio estratégico: la Cuenca del Plata y dio información acerca de la importancia de esta arteria siendo una vía de circulación clave de América Latina por donde salen mercancías al mundo. Asimismo, apuntó contra las agroexportadoras y algunos organismos e entidades del sistema financiero como el FMI y los Fondos Buitres que se quedan con las riquezas que nos pertenece.
A su vez, ayer tuvo lugar un zoom organizado por el Foro por la recuperación del Paraná, en el que abrió con sus palabras el legislador provincial, Carlos del Frade, quien convocó a movilizarse el próximo 2 de abril por Malvinas, en pos de recuperar el control del Paraná y por nuestra soberanía.
Estamos hablando de la cuenca hídrica del Plata, una unidad territorial e hídrica donde todos los imperialismos del mundo tienen un interés en controlar, así como de mantener la incomunicación entre nuestros mares y la comunicación con el Paraná
“Es una situación en primer lugar de defensa y geopolítica. Estamos hablando de la cuenca hídrica del Plata, una unidad territorial e hídrica donde todos los imperialismos del mundo tienen un interés en controlar, así como de mantener la incomunicación entre nuestros mares y la comunicación con el Paraná”, fueron las palabras de apertura de Luciano Orellano, miembro del PCR Santa Fé y autor del libro “Argentina sangra por las barrancas del Río Paraná”.
“El proyecto que está planteado en América del Sur es correr la frontera agrícola 50 millones de hectáreas más y el eje de la matriz productiva de los últimos 20 años ha sido la soja. Hoy Brasil ya está en 66 millones de hectáreas, un crecimiento exponencial de hace 10 años. Es decir, la magnitud de los cambios y la velocidad era impensado que Brasil iba a pasar a ser el principal productor de soja superando a EE.UU”, amplió Orellano.
Según el referente, la consigna consiste en avanzar por la derogación del DNU 949/20. “Tenemos que unir al pueblo argentino, no podemos vivir de espaldas a la soberanía, a nuestra riqueza. La primera tarea que tenemos es recuperar nuestra riqueza y la organizamos. Es decir, todo lo que refiere a la producción. Es decir, quién produce y quien nos dice cómo lo hacemos. El Estado ha delegado todo eso durante los últimos 30 años”.
En la situación actual nos “programa Cargill, Bunge, Aapresid, el grupo CREA”. Ellos son los que controlan los puertos. No hay siquiera en la provincia de Santa Fé un registro de puertos. No sabemos cuánto pagan de impuesto inmobiliaria además de todo el fraude”, planteó Luciano. Por ello esto “es una causa nacional, no solo del litoral. Nosotros tenemos que discutir esta propuesta que se están conformando los foros. Es un proceso que no termina en la hidrovía y hay que derogar el decreto”, finalizó.