El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó un nuevo préstamo para Chile de 3.500 millones de dólares a devolverse en un año, a través de un instrumento creado en 2020 llamado línea de Liquidez de Corto Plazo (LLCP) que prevé un respaldo rotatorio y renovable a países miembros que respeten algunas condiciones de “solidez económica”.
Por su parte, el organismo multilateral explicó en un comunicado que la línea “respaldará la resiliencia económica de Chile al proporcionar un respaldo para las necesidades de liquidez potenciales moderadas a corto plazo”.
Cabe resaltar que Chile anunció el mes pasado la salida del acuerdo de la Línea de Crédito Flexible (LCF) que había obtenido en 2020, por un monto de alrededor de 23.930 millones de dólares.
Según el Banco Central de Chile, en su informe sobre la balanza de pagos, la deuda externa en marzo de este año “creció en US$4.512 millones respecto del cierre del año anterior, totalizando US$243.513 millones, cifra equivalente a 76,8% del PIB”. El mayor responsable de dicho aumento fue “el Gobierno, cuya deuda aumentó US$3.441 millones, debido a las emisiones de bonos realizadas en el trimestre”.
El informe indica que el 81% de la deuda se encuentra en dólares estadounidenses, el 7,2%, en euros y sólo el 7,0%, en pesos chilenos. Desde que asumió Gabriel Boric como presidente la deuda pública creció por más de 7.000 millones de dólares.