En una manifestación contra los despidos en las empresas del neumático, la policía Federal reprimió a los trabajadores. Exigen la reincorporación de 97 despedidos.
El miércoles 29 de mayo el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA) se concentró en las puertas de la Secretaría de Trabajo de la Nación en la Ciudad de Buenos Aires pasados los 15 días de la conciliación obligatoria dictada por los 97 despidos en la empresa Fate.
Ver: Trabajadores del neumático en lucha contra los despidos
Allí hubo un enfrentamiento con la Policía Federal que intentaba vallar a los manifestantes. Julio Cordero, el titular de la Secretaría, en una entrevista catalogó el hecho como un ataque a las fuerzas de seguridad y amenazó con iniciar acciones judiciales para que se sancione a los responsables. Además mencionó que abrirán “los procesos administrativos correspondientes” que podrían alcanzar al gremio.
Luego, la columna de trabajadores se trasladó al Congreso de la Nación donde se estaba llevando a cabo la audiencia por los despidos. En el lugar la Policía realizó un cerco que impidió la llegada de los manifestantes y reprimió la concentración con carros hidrantes y balas de goma.
Apoyos sindicales
El día previo a la movilización, la conducción del SUTNA había mantenido una reunión en la sede de la CGT con Pablo Moyano, co-titular de la Central y secretario general de Camioneros, quien le expresó su solidaridad ante los despidos y comentó que desde la CGT “reclamamos la reincorporación inmediata de todos los trabajadores despedidos y adelantamos que no permitiremos que estos empresarios avasallen los legítimos derechos de los compañeros apoyándose en el gobierno de Milei, que lleva adelante una política en contra de todos los trabajadores y trabajadoras del país”.
Luego de la represión, el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA) expresaron su solidaridad con los trabajadores del neumático y denunció “el accionar del Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Patricia Bullrich, por haber sido responsable nuevamente de una acción que significa lisa y llanamente la violación del derecho constitucional a manifestarse por parte de la ciudadanía”.
También se hizo eco la Federación de Aceiteros que denunció la represión como un “ataque contra el derecho a la manifestación y la protesta gremial, libertades democráticas fundamentales”. Además, exigieron “el pleno respeto de las garantías legales y constitucionales vigentes en nuestro país” y reafirmaron su “más profunda solidaridad con la lucha por la reincorporación de las compañeras y compañeros del SUTNA”.