Informes oficiales ilustran un cuadro de profunda decaida de los ingresos, condicionado a endeudarse para llegar a fin de mes.
E
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que en mayo la Canasta Básica Alimentaria (CBA) para una familia tipo se ubicó en $99.05. La CBA determina el valor mínimo de los consumos que demanda una familia para no ser indigente.
De esta forma, acumuló un incremento de 47,4% en los primeros cinco meses del año. Además, el Indec informó que el costo de la canasta básica alcanzó los $203.361. Lo necesario para que las familias puedan superar el umbral de la pobreza.
Regina Trevisanato, economista local, comentó a Tribuna que “una familia necesita al menos dos ingresos para cubrir la canasta total”, “por eso mucha gente recurre a tarjetas de crédito”.
Aunque aclaró que “no es un mecanismo que sea eficiente para ‘ganarle a la inflación‘ ya que el gasto financiero y el mantenimiento de la tarjeta es muy elevado, pero la gente lo utiliza porque la inflación es tan alta que los sueldos no alcanzan para finalizar el mes”.
Según un informe realizado por Focus Market, 4 de cada 10 hogares contrajeron deuda con alguna entidad bancaria en el país, mientras que 8 de cada 10 hogares mantienen actualmente deudas con prestamistas o comercios.
En promedio un hogar mantiene deudas con una entidad bancaria por $361.686. El endeudamiento por fuera de las entidades bancarias se destina a abonar servicios, impuestos, cuotas de gastos diarios, pagados con créditos o con el método de compra al fiado. Inclusive, algunas entidades bancarias como Nación, comenzaron a ofrecer créditos para alquilar.
También, otros métodos que las familias eligieron para financiarse son: no pagando servicios como luz, agua, internet (3,2%), no pagando impuestos (11,9%), con préstamos de familiares y amigos (9,3%), no abonando expensas (6,9%), no abonando cuotas de educación (5,7%), vendiendo seguros que tenían o planes de auto (10,6%).
Según la Encuesta de Financiamientos y Medios de Pago que presentó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Ministerio de Economía argentino, entre octubre y noviembre del año pasado, el 53,4% de la población solicitó créditos o préstamos.